Una vez terminado un tratamiento de ortodoncia y se retiran los brackets -o el sistema de ortodoncia elegido- llega un momento muy importante del proceso: la retención. Y es que, esto será lo que nos garantice los resultados de por vida de todo un tratamiento. Los retenedores removibles o fijos son cruciales, y es importante saber usarlos.
Si no utilizamos los retenedores después de la ortodoncia, nuestros dientes acabarán en la posición que tenían anteriormente, puesto que los dientes tiene una tendencia natural a moverse. Tener cierto cuidado con los mismos es fundamental, y por eso, hoy, desde Clínica Ortodoncia Ortega queremos daros algunos consejos básicos al respecto.
¿Qué cuidados debemos tener con nuestros retenedores?
Precaución a la hora de quitar los retenedores.
Los retenedores removibles son resistentes, pero es importante cuidarlos con cierta cautela. Por ejemplo, recomendamos alternar el lado por el que lo sacamos, para así evitar su desgaste.
Limpia los retenedores.
La limpieza de los retedenores es fundamental. Los fijos podrás hacerlo en el cepillado de dientes habitual, los removibles, cada vez que los retiramos.
Guárdalos en donde corresponde.
Junto con tus retenedores removibles te darán una caja específica para su guardado. Es importante que cuando no los estés usando los pongas ahí, es el lugar más seguro.
Cuidado al morder.
El retenedor removible debe quitarse antes de comer, de lo contrario podríamos romperlo. Y al tener el dijo, debemos tener cuidado al morder, sobre todo si se trata de un alimento «duro» y tras morder tiramos de él hacia delante.
Acude a las revisiones.
El ortodoncista pautará una serie de consultas para hacer un seguimiento del tratamiento. Es importante acudir a todas ellas para que el especialista compruebe que todo marcha como debería.
